Homenaje a Daniel José Pons

No sé lo que durará, quería hacerlo todo con figuras de Daniel, pero he ha quedado muy serio, le falta locura, anacronismo, descontrol. Pero esas figuras valen un potosí.

La escena empieza con el flautista, un semipalillo de Daniel con ayuda de Siscu Bertràn en el modelado del árbol. Una idea que me propuso Félix. El nacimiento es el que usaba siempre mi madre y le tengo un cariño especial. La vaca es muy muy antigua, y por fin es de la misma escala que los pastores (o casi, debería ser un poquito más grande todavía). En un rincón separado hay dos pastores adorando, que son mucho más chicos.

La escena es imposible de fotografiar, por tamaño, forma e iluminación. Antes os he colgado un video (sazonado con el aria inicial de las Variaciones Goldberg), ahora unas fotos, tampoco excesivamente buenas.

Algunas más....

No sé qué tienen tus belenes que fascinan. En este caso, especialmente, sus bellísimas figuras, en cada una de ellas se percibe claramente la impronta de su autor (y hasta de quien las colecciona). Su gran expresividad y cuidado en los detalles aportan carácter y personalidad, logrando que incluso un belén “serio”, sin anacronismo ni descontrol (según afirmas), se transforme en un montaje atractivo y lleno de interés: un auténtico homenaje a Daniel José Pons.
Gracias por compartirlo, feliz Navidad.