Tras años sin poder instalar lo más parecido a un nacimiento o belén en mi hogar, este año y gracias a la ayuda de mi yerno que me ha arropado en su realización, en tan solo 10 días, he podido construir este humilde trabajo, el cual me hubiera gustado desarrollar más y cuidar más aún los detalles, pero a horas sueltas el 24 de diciembre a las 02,00 horas, lo dimos por finalizado.