Enric, pienso igual que Iñigo, pero si es verdad que esos momentos en que estás "manoseando" el barro y ves que aparece algo, que las figuras están tomando forma, que lo que tienes en la mente está saliendo, son momentos muy bonitos, y no paras de mirar las figuras por un lado y por otro como si las hubieses acabado de comprar.
Con respecto al lugar de trabajo y los utencilios, cada uno tira de lo que tiene y de lo que puede. Si mi señora me ve en el salón con el barro, ten por seguro que las figuras y yo dormimos esa noche en el garaje.
Un saludo.
Modificado por bufe 1/11/2008 01:23