Pues si hacer belenes es cosa de crios yo soy un crio con 47 tacos y muy orgulloso de serlo y espero seguir siendolo muchos mas, un saludo desde tierras murcianas y FELIZ NAVIDAD.

Efectivamente coincido en que el belenismo no es cosa de críos por los infinitos conocimientos que necesitos adquirir y ejercitar para obtener los buenos resultados que aquí se aprecian, pero considero que sí debería ser cosa de críos, de muchos crios a ser posible, ya que así quedaría garantizada para futuras generaciones esta preciso afición que a todos nos une en este foro.

Me parece que lo que muchos no entienden es que uno ,dedique tanto tiempo (robado al sueño en muchos casos)dedicacion ,y dinero(mas o menos pero dinero al fin)en algo sin fines lucrativos.
No es compatible con la vida actual,se piensan que el Belen es un juego,luego juego=niño
Yo sigo siendo un niño,no perdi el gusto por las cosas pequeñas ,ni la ilusion ,ni la fantasia..me da igual los golpes que la vida nos de,siempre seguire adelante ,quizas mas lentamente o con mas prudencia,pero eso solo me hace un niño mas experimentado(en la medida de lo posible).
Pena de aquel que deja de ser niño,en todas las facetas ,no solo en belenes..no saben la importancia de lo que se pierde.
y como ya mencione en otras ocasiones todo es compatible,soy un fanatico del futbol.llevo en mi corazon al Bangu (de Rio de janeiro y para ser banguense hay que tener mucha ilusion y locura)),al San Lorenzo de Almagro (Argentina) y al Deportivo de la Coruña...y me gustan muchas cosas mas que nada tienen que ver entre ellas.
Niño???...mi mujer aveces me dice que soy un bebe gigante,,y si miro fotos creo que tiene razon gordito y pelado (cada dia retrocedo mas jejej)..espero que no tenga que cambiarme los pañales!
quizas la palabra correcta es que somos AUTENTICOS ..se puede gustar mas o menos ..pero ...es asi

Tengo 50 años y llevo ya muchos montando el belén. Como todos los que nos dedicamos a esto, soy belenista durante todo el año; esto quiere decir que durante el verano, ya pienso en lo que puedo hacer. Siempre se me ocuren cosas que unas veces ejecuto y otras, no. Algún año he comenzado la construcción durante el mes de Agosto, aunque lo habitual es que comience en Octubre. Luego, lo dejo montado hasta San José, más o menos (15 ó 20 días me parecen poco disfrute). En fin, soy como casi todos...
Leyendo los mensajes vertidos en este foro da la sensación de que en general, la gente ajena a esta afición no nos comprende y que incluso nos denostan. Pero la percepción que yo tengo es distinta: Sí que es verdad que hay gente que no se ha parado a pensar que esta afición exista, pero cuando les cuentas lo que haces y que somos muchos (porque somos muchos...) sienten interés por el tema y admiran la dedicación y paciencia que tenemos. Nadie me ha dicho nunca lo de los niños. Lo más que he oído es quello de "tus hijas te ayudarán" o "Qué bien; lo que disfrutaréis montándolo". La verdad es que nunca he dejado que me ayude nadie, pues es algo mío y lo considero parte de mi intimidad, pero una vez montado y gracias al Belén he tenido trato con vecinos a los que a duras penas saludaba en el ascensor. También llega gente de la calle, amigos de amigos y conocidos, que se entera de que tienes algo que enseñar y te pide que le dejes entrar a tu casa para verlo. La verdad es que todas las experiencias que tengo en ese sentido son buenas. ¿Sabéis qué piensa mi mujer? Es una afición barata (la escayola, el porexpán y la pintura cuestan poco dinero) y además la desarrollas en casa y no por ahí. Eso sí, a veces mancho un poco, mojo el parquet porque se me sale el agua (por qué nos empeñaremos en hacer que el río fluya todos los años) o bien hago saltar los plomos en alguna ocasión, pero en casa. Tengo un amigo que tiene como afición las motos de gran cilindrada y cada vez que hablamos con él, mi mujer piensa que "qué suerte tengo". En fin, solo quiero transmitir un mensaje positivo con respecto a este tema.
Un abrazo.

Muchas veces la ignorancia ciega a las personas. Después de ver cómo trabajan, estudian y materializan sus trabajos durante muchos meses al año, toda la dedicación que conlleva el desarrollo de un belén; creo que después de todo ello, pienso que considerar de "niños" a éstos, es una calificación muy a la ligera. Si bien si lo miramos bien no es un insulto sino todo lo contrario, porque son los niños los que más cerca están de Dios. Pero valorando en su justa medida a los que disfrutan y se dejan las multiples horas a golpe de horas de descanso y hasta de sueño, para mí tienen el mayor de los respetos, admiración y talante. Pues demuestran que son portadores de una de las mayores virtudes que existen: la paciencia. Claro está que el fin de todo ello es el Amor al nacimiento del Hijo de Dios. Larga viva al belenismo y que su espíritu esté siempre presente en todos los lugares de buena voluntad.