Marcelo, ya que te he descubierto ahora mismo, no hay dos sin tres, así que nuevamente mi felicitación más calurosa por las maravillosas figuras que haces, tienen una calidez especial. Las lavanderas son preciosas.
Sigue deleitándonos con tus obras, un lujo contemplarlas.
Un cordial saludo de una extremeña afincada en Madrid.