Hola Dayron, con toda la humildad pero también con todo el fervor de un belenista, te doy mi opinión.
Es evidente que el trabajo artístico es descomunal, la ambientación es fantástica y las horas de trabajo metidas ahí son incontables y el resultado, obviamente, es de lo más halagüeño en cuanto a obra monumental, y muy atractivo.
Hasta aquí, considero que habéis cumplido perfectamente los objetivos que, como Taller de Arte, os habriáis marcado y no hay más que felicitaros por una obra bien hecha.
Ahora bien, como tú mismo reconociste cuando nos presentaste el belén del pasado año, con ese belén, era la primera vez que realizabas este tipo de manualidades.
Y aquí, en mi opinión, es donde se produce la confusión en cuanto a lo que debe ser un belén.
Porque sinceramente pienso, aunque a lo mejor estoy equivocado, que un belén es algo mucho más sencillo que todo esto.
En el belén hay una sola idea que es la que tiene que dar sentido a todo lo demás y precisamente, esa idea, es la que tiene que ser resaltada por todos los demás componentes de la escenografía para reforzarla y para que, a ojos del espectador, se distinga perfectamente que esa obra, trata de la representación del hecho que da sentido a nuestras creencias.
Que para realizar esta representación, evidentemente, hay muchas formas, o estilos, de hacerlo y que, en mi opinión, todos son válidos siempre, claro está, que se trate de un belén y disfruto muchísimo viéndolos aunque eso sí, los que más me gustan son los que me provocan emociones, emociones belenistas, claro.
Y el arte, del que tú sabes mucho más que yo, para mi, es un fracaso cuando los recursos plásticos empleados no son capaces de reforzar la idea principal de la obra y crea una confusión en el espectador que pretende tener unas sensaciones especiales pero referidas al tema que va a ver.
Porque si tú mismo lo analizas, convendrás conmigo en que más que la representación del nacimiento de Jesús, lo que habéis conseguido es realizar un homenaje fantástico a Tolkien y claro, como podrás comprender, cuando el nacimiento queda relegado a un simple ingrediente de esa maqueta, la idea de belén se disipa por completo, al menos en mi opinión.
No obstante, te doy mi enhorabuena y te felicito por tan fantástico trabajo pero no como belenista, sino más bien como amante del arte e incluso también algo desde el punto de vista belenista porque el hecho de que esta obra atraiga a muchísima gente, estoy seguro que alguien sí que lo verá como un belén y, de alguna manera, estaréis contribuyendo a la difusión del mismo.
Gracias por mostrárnoslo y felíz año.
Un saludo.