En la parroquia nos pasó lo que dices con unas tallas grandes olotinas que tenemos alrededor de todo el altar, sin dudarlo, las enviamos directamente a los talleres que las fabricaron en Olot (artes religiosas) y en menos de tres meses nos las devolvieron como nuevas. No resulta demasiado caro, y antes de meter la mano y cargarnos la figura ó dejarla peor de lo que está, es mucho mejor enviarla a un buen restaurador.
Saludos.